Las mil y una noches en los artes visuales en oriente y en occidente
Número 36
Mohamed Mahmud Faid
Los cuentos de las mil y una noches, tienen orígenes artísticos, estilos expresivos y artes plásticas. Frecuentemente los artistas se inspiran en ellos, en su tratamiento y su formulación de las relaciones de la realidad con la ficción, así como los estados de sensibilidad, que reflejan sus expresiones, sus dibujos y sus diferentes formaciones, y la relación de aquellas expresiones y formulaciones con los criterios artísticos específicos, que son exclusivamente de las mil y una noches. Además de su lenguaje descriptivo, sus valores plásticos y la fantástica imaginación de sus creadores .Dice Dr.Mustafa Razaz: “quizá imaginemos la situación de los escritores de las noches, de cualquier clase, y su postura hacia artes de dibujo, escultura y pintura, que en aquella época estaban asediadas y ocultas a la vista, sufriendo prohibición por temor a asociacionismo”. Esa represión es la que llevó a la aparición de aquellas artes, expresadas en prosa por el creador, mediante textos de sus cuentos, abreviando con sus técnicas, artes plásticas, esculturas y murales, dibujados o pintados, como:”palacios de Jerbat el detonador y Omaira en el valle de Jordania, y todo lo visible de las estructuras de faraones, sasánidas y romanos, y las tropas que guardaban el palacio donde enterraron el césar “Qin Shi Huang” desde el siglo III a. c., figuras de guerreros y caballos de tamaño real, los enterraron por orden del césar. Eran siete mil caballeros armados con armas de bronce”. Esto encendió la imaginación descriptiva de los creadores de las mil y una noches, y les dotó con ideas importantes, y técnicas necesarias para imaginar las estatuas movibles, como el caballero mágico, guardián de las ciudades, que grita cuando un enemigo se aproxima a sus murallas, y otras numerosas cosas de extrema rareza, donde se mezclan lo físico con lo metafísico. Utilizaron esculturas, como las tropas citadas anteriormente, ciudades de cobre y exageraciones en descripción de tamaños y números, como la ballena o (la isla flotante) en el primer viaje de simbad, el animal fabuloso que hacia tragar elefantes a su cría y la serpiente de cristal con su cara humana en el centro de una bandeja de oro. “El reflejo de lo visto en sus descripciones, no era una mera suposición, sino que lo apoyaban los escritos de viajeros y geógrafos, que estaban repletos de artes de países que describieron Yakut Elhamaui, Elkazuini, Ibn Batuta, Elidrisi y otros viajeros, peregrinos, geógrafos, historiadores, científicos y mercaderes”. (El artista islámico y la ficción de las mil y una noches, revista fosul, número 2, abril 1994). Así adquirieron el sentimiento plástico- partiendo de unidad de artes- lo que amplió, profundizó y enriqueció sus textos literarios, a pesar de que se expresaron únicamente con la palabra, sobre lo que querían transmitir oralmente, o por escrito. La palabra no era meramente un medio de informar, sino que era plástica en primer lugar, lo que demuestra la fecundidad de su imaginación, la profundidad de su composición creativa y la riqueza de sus textos con técnicas y horizontes de expresión artística. Después de que el artista plástico árabe musulmán, asimilase las creaciones de sus antecesores de las civilizaciones vecinas, les añadió numerosas formulas de su creatividad popular, hasta que se cristalizo su método en artes plásticas, y se representó con su estilo en la descripción dramática, un estilo expresivo diferente de la descripción dramática occidental, de forma que el artista iraní tomo prestados los estilos descriptivos de ambientes de heroísmo y batallas, de las bibliografías árabes populares, y de los cuentos de las mil y una noches. Esto lo confirma lo que encontraron los críticos en imitaciones y traducciones literarias de los ambientes, batallas y héroes de las bibliografías árabes populares, escenas de castigo al enemigo en las mil y una noches y en los cuadros de manuscritos persas, en los que confirmaba el artista iraní, sus prestaciones de las bibliografías y cuentos árabes, y todo lo que hay en ellas de técnicas artísticas, a través de sus dibujos en el libro “shahnamah” del Firdusi por ejemplo, y su descripción del ambiente de lucha de caballos, corazas y espadas, y volar a pedazos miembros del cuerpo, las caras de los luchadores, expresiones de dolor y crueldad, sus caballos, sus elefantes y sus camellos.
En 1430, “Bahzad”, también describió a los luchadores sobre sus camellos, en círculo, luchando con espadas, lanzas, corazas y escudos, caen cadáveres, vuelan espadas y corazas y caen camellos en un drama estrepitoso. Los manuscritos persas describieron también escenas de lucha contra leones, cacería de tigres, fieras y animales de presa, en medio de batallas violentas. Estos cuadros expresan con exactitud pasajes de batallas y victorias épicas que hay en las mil y una noches, y en las que sus creadores no se olvidaron de describir a los que llevan banderas, a los que tocaban trompetas, tambores y hasta los espías que observaban la marcha de las batallas desde detrás de las montañas.