Zarda: entre la legitimación tribual y la prohibición religiosa

Dr. Munyia Tumi: una investigadora de Túnez

Zarda es un fenómeno muy antiguo, lo conocieron los pueblos árabes antiguos y modernos y lo practicaron de diferentes formas coincidiendo en sus motivos que consisten esencialmente en acercarse a lo sagrado con sus diferentes tipos: cosas existentes y seres vivos. Es un fenómeno antropológico se practica en forma de ritos organizados a los que se incorporan las sociedades sean modernas o antiguas para vivir con ellos y formar a través de ellos sus símbolos e imágenes de sí mismos, de las cosas y del mundo, y a través de ellos determinan los sistemas de su vida colectiva y sus criterios propios.

Los conceptos teóricos relacionados con Zarda se multiplican y varían según las opiniones sobre ella, puesto que un grupo del vulgo se inclinaron hacia su legitimación considerándola una costumbre de nuestros ante pasados que hay que celebrar, mientras que la mayoría de los ulemas y alfaquíes se inclinaron por su prohibición, considerándola incompatible con la religión islámica que incita a la necesidad de liberarse de las costumbres tribuales transmitidas por herencia incluyendo Zarda, al que las celebraciones que se organizan a su alrededor las compararon con “las bodas del diablo”.

El árabe practica numerosos ritos para acercarse al sagrado con sus diferentes tipos, estos ritos son “un conjunto de actos y gestos que se realizan obedeciendo a la experiencia religiosa interna aspirando a tener conexión con los mundos sagrados”. “Fara Sauah” divide las practicas rituales en el marco de su conversación sobre la cultura del antiguo oriente en tres tipos principales que son: ritos de magia, ritos rutinarios religiosos y los grandes ritos periódicos. Los ritos de la magia se basan en creer en la existencia de una fuerza extraordinaria en todos los aspectos del universo, esta fuerza el mago que conoce bien las artes de la magia puede poseerla, y a través de ella puede curar las enfermedades crónicas, alejar los malos espíritus y dominar los elementos de la naturaleza. Los grandes ritos periódicos se celebran para lograr que la tierra sea fecunda.

Zarda se considera uno de los ritos religiosos rutinarios que el hombre practica para acercarse a los santos realizando oraciones, preparando comidas, presentando sacrificios parecidos a una ofrenda y preparando comidas y bebidas en los santuarios. Es una actividad sagrada y una forma de devoción popular que en su ámbito se forman creencias y abriga practicas religiosas y festivas donde se manifiesta lo sagrado, por eso la celebración de este rito, es como conservar vivo al santo mismo. 

A pesar de la prohibición del islam la celebración de Zarda, la mayoría de los pueblos árabes con sus diferentes clases, legitiman Zarda y bendicen su celebración porque siguen creyendo en los santos y no han dejado de querer a estos que protegieron el país y bendijeron la gente. En Túnez aún siguen celebrando banquetes en busca de su bendición.