Estudio de conocimientos y técnicas tradicionales en la plantación de la palmera en la región de Marui al norte de Sudan
Número 40
Dr.Asad AbderrahmanAuad Allah – un escritor de Sudan
El estudio, llega a la conclusión de que estos conocimientos y técnicas tradicionales en la plantación de la palmera, ayudan a la sociedad de la región de Marui, en la conservación del medio ambiente, a través de sus medios inspirados en la naturaleza local, que no dañan el medio ambiente, por ejemplo; la gente no utilizan productos químicos en la plantación de las palmeras, y a cambio utilizan abono orgánico (Elmaruk), que es de desperdicios de animales, y no utilizan maquinarias, como los modernos tractores, en el proceso de arar, lo que conserva la tierra. El labrador de la región, se distinguió en la profesión de aplanamiento, con lo que pudo plantar trasplantes de palmeras, que produjeron dátiles de buena calidad. Aquí viene el papel de los profesionales de trasplante, que llevan a cabo este proceso. El profesional, aísla el trasplante de la palmera madre, y le cava una zanja de su tamaño, y lo planta en ella, utilizando instrumentos tradicionales de labranza, como la azada para cavar, y la palanca que utilizó también en aislar el trasplante de su madre, y entierra el trasplante con la misma tierra de la zanja, para conservar la frescura de los raíces del trasplante, y esparce sobre él, desperdicios de animales, como abono orgánico, regándole después con agua. Este proceso, no daña el medio ambiente, mas bien, se manifiesta la conservación del medio ambiente en plantar trasplantes. Por otra parte, la recolección de dátiles, fue llevada a cabo, por el hombre, con medios tradicionales, utilizando las manos, con la ayuda de la hoz, y almacenó la cosecha, utilizando también, sus conocimientos tradicionales, con los que conservó la producción de dátiles, para largos periodos. Eso también, se asoció al medio natural, poniendo los dátiles bajo rayos de sol, para que se secaran, pavimentando la cosecha sobre troncos de palmeras al aire libre, y con este proceso, se lleva a cabo la conservación de la cosecha.
Si miramos a la palmera, y a los conocimientos y técnicas tradicionales, relacionadas con su plantación en la región, vemos que representa, la necesidad ambiental, en gran medida; y eso porque el medio geográfico y natural, influyó en ella. El clima, y la capa vegetal, obligaron a los habitantes a practicar esas actividades, puesto que encontramos que las palmeras, como vegetal, no crecen y no producen, salvo en el medio del clima saharaui, que se caracteriza, con altas temperaturas, poca humedad y falta de lluvia, este clima, es el que reina en la región de Marui. La plantación de palmeras en la región, representa la primera actividad agrícola, y se considera, como fuente de ingreso para la economía. Los dátiles, se consideran la cosecha principal, por eso, se extiende su plantación a lo largo de la faja del Nilo, no solo en la región de Marui, sino en todas las regiones que están a la orilla del Nilo, sobre la extensión del medio saharaui, en el norte de Sudan. El hombre en la región de Marui, a lo largo de la historia, y a través de sus intentos de aclimatarse y adaptarse a este medio, aprovechó la palmera como fuente de importantes ingresos, de acuerdo con sus necesidades. Descubrió e inventó numerosos métodos y medios, para utilizar aquel árbol, para ayudarle a satisfacer sus necesidades. Todo lo que consiguió, se considera adecuado, después de probar y experimentar, y como resultado, con el paso del tiempo formó su cultura, que se refleja en sus conocimientos y sus técnicas tradicionales, que utilizó en la plantación de las palmeras, y en las destrezas en las profesiones tradicionales, que inventó.